Aunque el hurto y el robo implican la sustracción de forma delictiva de un bien ajeno, jurídicamente son dos términos distintos, por lo que conviene conocer las diferencias que existen entre ellos.
DIFERENCIA ENTRE HURTO Y ROBO
«Te roban la cartera en el tren mientras hablas por teléfono y no se da cuenta». A menudo solemos utilizar de manera genérica la palabra «ROBO» para referirnos al acto delictivo de la apropiación de un bien ajeno, pero no es correcto. Pues, no siempre se trata de un robo, a veces puede ser un hurto. Jurídicamente son dos términos distintos, así que deberías conocer el significado de cada uno de ellos, especialmente si vas a contratar un seguro, ya que en las coberturas de algunas pólizas se hacen distinciones entre estos dos conceptos.
Según el artículo 234 del Código Penal, el hurto es la acción, con ánimo de lucro, de tomar «las cosas muebles ajenas sin la voluntad de su dueño».
Mientras que el robo se define en el artículo 237 del Código Penal como la acción con ánimo de lucro de «apoderarse de las cosas muebles ajenas empleando fuerza en las cosas para acceder o abandonar el lugar donde éstas se encuentran o violencia o intimidación en las personas, ya sea al cometer el delito, para proteger la huida, sobre los que acudiesen en auxilio de la víctima o que le persiguieren.”.
Así, en el artículo 238 del Código Penal se señalan estos cinco casos de robos en los que se emplea la fuerza en las cosas: escalamiento; el rompimiento de una pared, techo o suelo o la fractura de una puerta o ventana; la fractura de armarios, arcas u otra clase de muebles y objetos cerrados o sellados, así como el forzamiento de las cerraduras o el descubrimiento de las claves para sustraer su contenido; el uso de llaves falsas y la inutilización de sistemas específicos de alarma o guarda.
Como pueden comprobar, en ambos casos se hace alusión a la apropiación de un bien ajeno sin el consentimiento de su dueño. La diferencia sustancial es que en el robo se utiliza la violencia o la intimidación de las personas, o bien se ejerce la fuerza en las cosas para acceder a ese bien, y en el hurto no.
El ejemplo más repetido, si dejas tu coche abierto por algún descuido y alguien se lleva el bolso que has dejado dentro, se trata de un hurto. En cambio, si el coche está cerrado y alguien fuerza la cerradura para entrar y sustraer el bolso, es un robo.